Tras un comienzo de temporada poco prometedor, y un segundo episodio un tanto mejor, Once Upon a Time sigue marcándose su particular in crescendo cada semana. El nuevo episodio, el 6x03 "The Other Shoe", ha rescatado del olvido a Cenicienta -ese pueblo se traga a sus habitantes, os lo digo yo- y nos ha contado una buena historia con un regusto a los cuentos de la primera temporada que ha sido fantástico. Sigue sin reconectar con esa calidad que sí hubo en aquellos tiempos (dulces tiempos), pero es indudable que lo está intentando... y, al igual que nos quejamos de sus vastos defectos, también toca darles algunas palmaditas cuando hacen algunas cosas bien.
¡Spoilers a partir de aquí!
La Evil Queen tiene el propósito de fastidiar a Emma (como todo villano que se precie), y para tener éxito en su malvada y sexy empresa intentará herir a la gente que nuestra salvadora quiere y ha ayudado a lo largo de la serie. Toda la premisa de la temporada gira en torno a las "untold stories", esas historias que no llegaron a ser contadas, que quedaron en "pausa" y que, ahora, con la ola de refugiados llegada a Storybrooke de ese mundo, tienen el potencial de desarrollarse y dirigirse hacia su inevitable final trágico; inevitable como la muerte de Emma, spoileada (nadie se libra hoy en día de los spoilers) por Twitter sus visiones. De esta forma es como "The Other Shoe" se ha lanzado a reexplorar la historia de Cenicienta, no tan acabada como creíamos, y abocada a un final infeliz...
Las ves y solo por esos peinados ya sabes que son malas. Y horteras además.
Me ha gustado mucho conocer más a fondo la historia clásica de Cenicienta. Me quedé con más ganas de ella en la primera temporada, y me lo he pasado pipa viendo las putadillas que hacía a Cenicienta su madrasta mala malísima y travesti. Reconozco que soy un poco fácil en ese sentido; me ha hecho ilusión sentir que la serie reconectaba con sus inicios, hilando de forma tan inteligente la historia del pasado (más dulce, más "mágica") con la del presente, mucho más adulta y "seria". El ver a Cenicienta corriendo por las calles de Storybrooke con una escopeta, atormentada por sus decisiones del pasado, ha sido todo un momentazo.
Emma, por otra parte, tiene que enfrentarse a un crisis existencial de tomo y lomo. El saber que morirá y que no podrá tener su final feliz es algo que la está consumiendo. ¿Es por eso que está fallando su magia? ¿Porque no cree en sí misma? Sea como sea, ha sido ella -la pobre tiene trabajo cada día- quien ha tenido que salvar a Ashley de ese "final infeliz" al que ella, al parecer, estaba destinada, pero que quedó "en pausa" cuando su madrastra y su hermanastra viajaron al mundo de las historias no contadas. Cuando su madrasta la apuñala (¡¿pero esto qué es?! ¿Scream?), nuestra Emma debe volver a creer en sí misma; alentada por Garfio, recupera su magia y salva a Ashley. De nuevo, ha invertido las tornas. Ha derrotado al destino. Cenicienta sí tendrá su final feliz.
La historia de este episodio, como digo, me ha parecido bastante buena (sobre todo si la comparamos con los truñicos que hemos visto últimamente en la serie). Lo que me repele un poco es este rollo de "me voy a morir y no puedo evitarlo", porque la serie ya nos ha "estafado" muchas veces con esta idea. ¿Recordáis cuando Charming iba a morir irremediablemente en la tercera temporada, durante la trama de la isla de Peter Pan? Once Upon a Time sabe plantar ideas interesantes, pero luego no es valiente ni llega hasta al final con ellas.
La historia, por tanto, muy cogida con pinzas, se siente más bien como una excusa para hacer drama facilón entre Emma y Garfio, para qué os voy a mentir. Este capítulo, pues, os habrá encantado a los fans de la pareja: hasta yo, que aborrezco a Garfio, pegué chillidos de fanboy cuando el pirata jugó con el bebé y Emma perdió las bragas. Fue un momento muy cuqui, ¿vale? Y si es cuqui, se dice y ya está.
La historia, por tanto, muy cogida con pinzas, se siente más bien como una excusa para hacer drama facilón entre Emma y Garfio, para qué os voy a mentir. Este capítulo, pues, os habrá encantado a los fans de la pareja: hasta yo, que aborrezco a Garfio, pegué chillidos de fanboy cuando el pirata jugó con el bebé y Emma perdió las bragas. Fue un momento muy cuqui, ¿vale? Y si es cuqui, se dice y ya está.
AY, QUE ME LOS COMO A LOS DOS.
En general se siente que los guionistas, como decía, se están esforzando mucho por recuperar la esencia perdida de sus orígenes. No hay más que fijarse en las tramas y en todos los guiños: Blancanieves quiere volver a ser profesora, Charming está investigando un misterio familiar, nuestra Emma está llena de dudas como al comienzo -y como siempre-, Regina lucha contra su parte más oscura, e incluso Rumple se esfuerza por perseguir a un hijo que, por lo pronto, está fuera de su alcance. No puedo decir que la serie vuelva a ser lo que era, porque sería excederme (y mucho), pero sí que se nota que lo están intentando, y que ello está dando ciertos frutos y buenos momentos.
De momento, lo poco que llevamos ya sea, quizá, bastante mejor que esa quinta temporada tan torpe. Llegados a este punto, tengo las expectativas algo bajas con Once Upon a Time: si siguen dándonos episodios en la línea de esta, estaré contento. ¿Y vosotros?
PD: Creo que no hablamos lo suficiente de lo gran actriz que es Lana Parrilla.
Para mi sorpresa el episodio ha sido entretenido simplemente porque todos tenían algo que hacer. Tened por seguro que ahora que Cenicienta ha encauzado su pasado no la vamos a volver a ver hasta dentro de un tiempo y dos minutillos de nada. No me fío del agujero negro que absorbe personajes qué le vamos a hacer. Por otro lado esa faceta de la madrastra homicida me ha gustado y esos meneos de bastón karateka ^o^
ResponderEliminarMe gusta la pareja que hacen la Reina y Mr Hyde, parecen hechos el uno para el otro aunque todos sabemos que en cuanto dejen de necesitarse harán de todo por matarse.