Qué cansado estoy. La paciencia que hemos tenido los fans de The Walking Dead durante el lamentable comienzo de su octava temporada ha sido tan extraordinaria que merecemos, como mínimo, que erijan estatuas en nuestro honor por seguir a bordo. Porque ha ocurrido lo impensable: seguidores acérrimos de la serie, grandes entusiastas entre los que yo me incluyo, hemos terminado hartos de las memeces de The Walking Dead. Todo tiene un límite, y los errores de esta temporada han sido tan básicos, tan imperdonables a estas alturas, que ni siquiera sé por dónde empezar.
¡Spoilers de los ocho primeros episodios!
Solo faltaba que se hubieran cargado a uno de los pocos personajes que cae simpático. Pero, incluso de haberlo hecho, me habría dado igual.
The Walking Dead es capaz de grandes cosas. Es una serie que puede funcionar muy bien cuando explora su faceta más "intimista": algunos de sus mejores episodios son, de hecho, aquellos que profundizan en un puñado de protagonistas. El 6x13 "The Same Boat" –el capítulo del secuestro de Carol y Maggie–, e incluso el episodio de aquel mítico "look at the flowers" son la prueba de que The Walking Dead puede tener un nivel excelente cuando quiere. Pero esta temporada no ha querido, o no ha sabido, mantenerlo, y el bajón de calidad que ya comenzó en la séptima temporada, en lugar de remitir, ha ido creciendo de forma imparable... para horror y hartazgo de las audiencias, que huyen en estampida.
La estructura de esta temporada ha sido tan idiota que siento auténtica incredulidad. Me inquieta, me atormenta y me perturba (¿debería llamar a Esperanza Gracia?) que un equipo de guionistas adultos en plena posesión de sus facultades mentales hayan pensado que estos guiones eran buenos y serían aplaudidos por el público. Porque NO lo son. ¿Qué es esto de retomar conflictos cada cinco episodios? ¿Dejar encerrado al cura con Negan y volver a saber de ellos semanas después? Hay decenas de personajes pululando por la pantalla, pero los han desarrollado tan mal que apenas sentimos apego por ellos, más allá de lo que queda de los recuerdos. Rick, Maggie, Michonne, Carol y Daryl son grandes, pero no han tenido un solo momento de gloria estos episodios.
La relación de estos dos sí es algo bastante interesante... pero, ups, va a terminar.
Pensaron que sería una guerra épica. Pero no tuvieron en cuenta que, para que lo fuera, deberían haber creado una conexión emocional entre el espectador y esos personajes. El 8x05 "The Big Scary U" fue un buen episodio que, por fin, profundizó como es debido en Negan, pero llegó demasiado tarde. Porque aciertos esta temporada ha habido, sin duda –la tensión y el ambiente lúgubre del season finale estuvieron muy conseguidos–, pero insuficientes. Los fallos han sido de principiante, y no se pueden consentir a estas alturas de la serie.
Porque, ¿quién mierda es Neil? La pregunta que da título a esta crítica sintetiza los grandes problemas de la temporada. Vemos a Maggie sufriendo por la pérdida de Neil mientras nosotros nos preguntamos quién es y qué carajo nos importa que haya muerto. Vemos a Aaron sufriendo por la pérdida de Eric, pero nosotros no podemos sentir su dolor. Y no podemos sencillamente porque en dos temporadas apenas nos han mostrado nada de esa pareja. Es como si The Walking Dead esperase que sintiéramos apego a ellos "porque sí". Curiosamente, Eugene y el cura Gabriel son dos de los personajes que más interés me han suscitado esta temporada... lo cual habla por sí solo de la gravedad del asunto.
Cállense ya los dos.
The Walking Dead no puede vivir de las rentas de tiempos pasados mejores. No puede seguir matando gente aleatoria solo por cumplir su cuota de "muertes por episodio", porque las muertes deben significar algo. No puede plantear dilemas morales que a estas alturas se nos antojan demasiado pobres y redundantes. Sin chicha, vaya. En lugar de avanzar, The Walking Dead se siente atascada, enfangada, con un villano carismático mal desarrollado y unos grandes personajes como Daryl, Michonne y Carol absolutamente desaprovechados. Rick y Maggie sí han tenido algunos momentos decentes esta temporada, pero nada muy allá. Nada que nos emocione como antaño. Que nos emocione de verdad, que nos impacte, que nos estremezca. De eso, nada queda.
Y ahora nos encontramos con el cliffhanger de que Carl ha sido mordido. Pero la historia es tan absurda –un Carl "buena onda" y terriblemente estúpido al que ni siquiera entendemos bien, porque no se han parado a explicarnos como es debido su desarrollo–, que lo único que podía pensar al verle herido era... ¿en serio? ¿Van a librarse así, sin pena ni gloria, de uno de los pocos personajes de interés que les quedan? Bravo, guionistas. Gracias... por nada. Que dicen que esto será importante para Rick, que le hará avanzar. La importancia de ser bueno en un mundo terrible. Que cada vida importa, bla, bla, bla... pero no, perdona. Esta historia es un truño moruño, y ya está.
Suelo ser mucho más positivo con The Walking Dead; siempre me motiva y me inspira lo suficiente como para ver su mejor cara. Pero he llegado a un límite. No creo que nunca sea capaz de dejarla, pero sí espero que vuelva a tener un mínimo de inteligencia narrativa. Un poco, al menos. Porque esto, compañeros, es infumable. Y si vosotros la habéis disfrutado más, por favor, destacad sus mejores puntos. Porque a mí... ya ni me apetece.
Con esa cara veo yo ahora The Walking Dead.
Isidro López (@Drolope)
Pues si. Tienes razón en todo lo que has dicho. También soy incapaz de dejarla de ver, pero no me doy prisa por estar en el sofá sentada esperando que empiece un nuevo capitulo.
ResponderEliminar¿Tienes el megabate en la mano y solo se te ocurre darle con el mango?
Espero que tengan razón y el noveno capitulo sea "la leche", porque cada vez aburre más.
Gracias por comentar, Suzy.
EliminarEstamos todos igual, me parece :/ yo solo espero que hagan caso de las críticas de los fans (al menos del bajón de audiencias) y hagan ALGO al respecto.
Saludos!
No puedo estar más de acuerdo. Encima han explicado que fuimos testigos del momento en que muerden a Carl, y por eso iba tan despacio y dolorido. Yo ni me enteré. Fue hace dos capítulos o algo así. Que sea necesario explicar eso...
ResponderEliminarhttps://www.express.co.uk/showbiz/tv-radio/891753/The-Walking-Dead-season-8-midseason-finale-Carl-Grimes-AMC-Showrunner-shocking-moment
¿Os habiáis dado cuenta?
Hola Petrushka!
EliminarMmm. Sí, deduje que debía haber sido por ese momento aunque tampoco estaba seguro... lo cual hace toda esta situación incluso MÁS estúpida porque era una mierdecita de grupo de zombis que podrían haber esquivado fácilmente, pero el nuevo amigo de Carl estaba en plan "vamos a matarlos a todos, liberar sus almas wowow!" y Carl en plan "OK". Pos OK hijos.
En fin, pa mearse y no echar gota
Saludos!
Aquí otro de los que seguirá viéndola, supongo (porque después de 8 temporadas, ya es pura inercia como para bajarme ahora). Pero estoy 100% de acuerdo con tu crítica. Cansado ya de esa conducta errática que hace pasar a los personajes del buenismo al rollo psicokiller (Carol, Morgan, Jesús, Carl...) y vuelta a empezar, sin que lleve a nada al final. Una mid-season cargada de despropósitos que hace que la pérdida de personajes ya no le importe a uno como antaño. Ya es matar personajes porque sí, por cumplir con la cuota, aunque sus muertes no tengan ningún significado. Unos Salvadores acorralados, bajo mínimos, que de un capítulo a otro pasan a cortar de nuevo el bacalao y se teletransportan a las comunidades pacíficas en plan “aquí no ha pasado nada”. Po’ fale! Hasta Negan, que me parecía un villano brillante, ya me harta con esa chulería torera que no viene al caso. ¿Y qué narices querían demostrar Aaron y Enid con esa treta -metedura de pata- antes de acudir a la comuna de mujeres?? En fin, de traca esta temporada :/
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