Crítica de The Family, una gran premisa llena de tropiezos

12/8/16


Lo primero es lo primero: esta serie, llamada El secreto de Adam en España, se estrenó este mismo año en el canal ABC y fue cancelada al término de su primera temporada. Yo no había escuchado nada de ella hasta que no la vi de anunciar en la televisión, y no indagué hasta que la acabé, así que su cancelación me ha pillado tan de sorpresa como al público estadounidense.

Antes de entrar en materia quiero “agradecer” a Telecinco por el trato que le ha dado a la serie: empezar todos los días al menos veinte minutos tarde respecto a lo programado, poner un número variable de episodios cada semana, etc. Todas las buenas prácticas que suelen darse en la televisión española con las series, en resumen.

Ahora sí, vamos al lío, de aquí en adelante hay spoilers:

The Family trata un tema que al menos yo no estoy acostumbrado a ver representado en la ficción, como es el de la pederastia, y lo hace muy bien. Por un lado conocemos a la víctima de los abusos y su familia, y por el otro nos presenta a dos pederastas completamente distintos entre sí y a sus respectivas familias.

La constante comparativa que puede hacer el espectador entre Doug Anderson y Frank Asher se me antoja uno de los aspectos más interesantes de la serie. A lo largo de los capítulos se establecen muchos paralelismos entre ambos, a la vez que se refuerza la certeza de lo diferentes que son.

Lo cierto es que desde un primer momento le he visto algunos parecidos con la británica (y brillante) Broadchurch: el hincapié que se hace en las relaciones de los miembros de la familia protagonista, la detective que cae en desgracia, la propia pederastia… Pero que esto no os llame a engaño, quitando estos temas comunes se parecen lo que un huevo a una castaña.

El misterio que mueve la serie y que da nombre a esta en España ya sería lo suficientemente atractivo para justificar la serie por si solo, pero tiene varias ramificaciones que se convierten en subtramas por derecho propio, y que en general sirven de excusa para presentarnos a los distintos miembros de la familia y de los implicados en el caso Warren, así como la forma en que cambiaron sus vidas con la desaparición del pequeño. Los continuos flashbacks en general están muy bien integrados en la acción y no la entorpecen.

Los personajes que más me han llamado la atención son casi todos de la familia. Danny se presenta como un personaje interesante y complejo, que sabe desde el principio que algo no encaja en la historia de Adam; se pone a hacer sus pesquisas y cuando tiene ya suficientes indicios de que está en lo cierto… lo deja correr. ¿Por qué? Pues no se sabe muy bien, llamémoslo conveniencia del guión. El hermano mayor pasa de ser casi una extensión del espectador a una comparsa de su hermana.

Precisamente Willa también tiene un cambio radical a mitad de la serie. Su máxima obsesión, su meta vital, es conseguir que su madre sea elegida gobernadora y quizá con el tiempo presidenta (recordemos que unir a la familia es sólo parte de ese plan), pero por algún motivo empieza a elegir los momentos clave de la campaña electoral para soltarle los bombazos más desestabilizadores posibles respecto a Adam. Teniendo en cuenta todo lo que lleva guardando durante estos 10 años su comportamiento no tiene ningún sentido, salvo dar un plus de tensión y dramatismo a la trama. Es cierto que es uno de los personajes con mayor evolución de la serie, pero su actitud en ese sentido sigue siendo incongruente. ¿Soltar en pleno recuento de votos que Ben mató a Adam? No estamos en la hora amateur, Willa.

Si Adam no fuera interesante tendríamos un problema, claro. Desde el primer momento notamos, al igual que Danny, que algo falla, todo va bien y a la vez algo va mal con la reaparición del muchacho. Lo cierto es que con el paso de los capítulos llegas a sentir de todo por él: pena, suspicacia, odio, incluso miedo en algunos momentos.

"El desear algo no te convierte en un monstruo, es cogerlo lo que lo hace."


El mejor personaje aparte de los jóvenes Warren es Frank Asher, un hombre cuya vida han marcado las injusticias. Él no entiende a la gente, tiene miedo de relacionarse con los demás, y para más inri tiene ciertos deseos que sabe que no debería tener y trata de reprimir a toda costa, recurriendo incluso a la medicación. Tampoco ayuda a que a partir de cierto punto todo el mundo le considere un monstruo, incluso sin tener conocimiento de causa.

Me ha parecido especialmente interesante el cómo se manejan con los medios de comunicación y su exposición a ellos la familia Warren y Frank Asher. Los Warren tienen a Willa, que siempre va un paso por delante de los periodistas y es capaz de manipular los acontecimientos, o al menos limitar sus efectos, para acabar cayendo siempre de pie, demostrando ser toda una mente maestra en lo que a manipulación se refiere.

Asher en cambio desde el comienzo del caso Warren se ve aplastado por la opinión pública. Su incompetencia social juega aquí una vez más en su contra, y se ve obligado a cumplir condena por un crimen que no cometió. Hacia el final de la serie cree empezar a entender cómo funcionan los medios y la mente de las personas, de ahí su inocente plan para convertirse en el héroe de Red Pines.

No soy precisamente nuevo en los relatos detectivescos, pero este plan confieso que ha hecho que me pierda. ¿Cuál es la prueba que tiene de que Anderson secuestró a Adam? Es decir, él dice que lo veía vigilándole y demás, y tiene la prueba de que estaba en la feria… igual que estaban otras trescientas personas. Sería su palabra contra la suya. Sí, una vez Nina hace las comprobaciones encaja con las pruebas y el perfil que tenía la policía, pero todo sigue siendo meramente circunstancial.

Hablando de Nina, la inconsistencia de la pareja de detectives es digna de estudio. No tienen ningún problema en matar a un sospechoso por acto reflejo y mentir sobre los hechos, pero luego son capaces de dejar libre a un asesino pederasta por un mero tecnicismo. 

Supongo que esto obedece más bien a dejar en suspenso en destino de Anderson hasta el comienzo de la malograda segunda temporada, pero sigue siendo absurdo, aunque la serie está llena de cosas así, como cuando Adam acaba de volver a casa y para poder dormir necesita estar tocando las paredes, y las primeras noches se mete en un armario para hacerlo y dormir tranquilo. Cuando los padres se enteran lo dejan seguir haciéndolo, pero digo yo que podrían haber movido la cama a una esquina de la habitación.


A pesar de las incongruencias y los errores más o menos de bulto como algunos de los que he comentado, The Family podría haber acabado como una miniserie bastante decente de haber tenido un final cerrado. Sin embargo, sabiendo que Anderson se va a ir de rositas y que Adam está vivo y en plan Liam Neeson en Venganza, el que la serie acabe ahí no hace ningún favor ni a ella ni al espectador.

Es cierto que no es nada del otro mundo, pero no creo que se mereciera la cancelación a las primeras de cambio. La historia es interesante y obviamente iba a tomar una dirección muy distinta a la vista en esta primera temporada, que a la vista de ese cliffhanger final da la impresión de ser una introducción al auténtico meollo del asunto.


¿Habéis seguido la serie? ¿Qué os pareció? ¿Alguno la vio a ritmo americano esta primavera? Esperamos vuestras respuestas.


P.D.: Indagando sobre la cancelación he encontrado una entrevista a la creadora de la serie, Jenna Bans, en la que habla de lo que iba a ocurrir en la segunda temporada. Podéis leerlo, en inglés, haciendo click aquí.


Vrahos (@VrahosSDC)

1 comentario:

  1. tenia tanto maldito potencial, me da tanta colerar haberla terminado asi. Mucho giro tras giro cansa pero esq en mi caso la serie me mantenia pegado. Aunq que se puede esperar del canal de shondaland. Las mejores cosas del canl son bueno Grey's, HTGAWM, American Crime y Quantico tenia potencial pero tmb se desinflo.

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