¡Hola a todos una semana más! Esta vez os traigo con casi
una semana de retraso la review del último capítulo de Hawaii Five-0. El
retraso tiene una explicación y la quiero compartir con vosotros: ¡el viernes
pasado fue mi cumpleaños! Así que este fin de semana había que celebrarlo. Por eso me ha sido imposible ver algún capítulo de alguna serie hasta esta semana,
pero ya os traeré todas las reviews que tengo que escribir.
*AVISO DE SPOILERS*
Pues este capítulo nos sitúa en una batalla de paintball
entre ejecutivos, de los cuales uno aparece muerto tras la conclusión de la
batalla. Pero el verdadero ambiente que se palpa en Hawaii esta semana es la de
la Pro-Bowl, el partido de las estrellas de la NFL – lo he mirado en Wikipedia,
¿vale? – a la cual van a ir Danny y Steve, autoinvitándose también Kamekona.
Sin perder el tiempo, nuestro equipo va a la escena del crimen donde
inspeccionan el lugar, con cadáver todavía presente, y hablan con los testigos.
Finalmente, tras inspeccionar los vídeos de las cámaras que llevaban consigo
los participantes, encuentran al autor del disparo, o por lo menos lo que se ve
de él.
Tras retener a un sospechoso y hablar con el jefe del difunto,
Max, el forense, le dice a Kono que el fallecido había sido drogado, algo
completamente extraño para una persona que iba a hacer un esfuerzo físico. Como
paréntesis en el caso, nos encontramos con Cath, la novia de Steve, quien
invita a éste a ir a la Pro-Bowl. Cerrando este paréntesis, McDanno, nuestra pareja
estrella en esta serie, se dirigen a un restaurante de la zona, donde hablan
con otro sospechoso con la ayuda de un peculiar ayudante. El sospechoso les
comenta que hay una chica que es estafadora que está también en el ajo. Así
que, el Five-0 se dedica a buscarla. Tras hablar con un par de sospechosos más,
al final dan con ella al haber sido engañada por el jefe del muerto, quien está
detrás de todo esto.
*YA PUEDES LEER TRANQUILAMENTE A PARTIR DE AQUÍ*
Tengo que decir que es un capítulo bastante normalito, sin
nada de chicha, lo que comúnmente llamamos “de relleno”. No me gustaría que
esta temporada acabase floja ya que, como dije en un post anterior, comenzó
bastante fuerte y que acabase de esta forma indeseada sería un duro palo
personal. Lo que me ha gustado del capítulo es, como en todos, la relación
McGarrett-Danno. Creo que es una las parejas televisivas que más juego dan, que
mejor me lo hacen pasar cuando veo un capítulo y que, a pesar de haber
comenzado con mal pie – que no se soportaban nada – han acabado como dos buenos
amigos. Vale, es cierto que es un tema muy manido, pero creo que ambos actores,
Alex O’Loughlin y Scott Caan, le dan su propio toque que hace que esta relación
sea especial, interesante, divertida. Conocemos más de cada personaje por sus
conversaciones tan dispares y eso me gusta. Por último, dejo una pregunta a ver
si alguien se acuerda: ¿ya hemos visto al primo de Kamekona alguna vez antes de
este episodio?
No hay comentarios:
Publicar un comentario