The Walking Dead regresó la semana pasada estrenando su sexta temporada con un episodio bueno, pero que se hizo un pelín largo de más, y en el que tiraron la casa por la ventana con el presupuesto para zombis. Por eso resulta tan irónico que este segundo episodio, con apenas zombis y tan pocos escenarios, haya sido mucho mejor. ¡Para que luego digan que esta serie solo funciona cuando hay caminantes de por medio!
Antes de comenzar el análisis, es importante tener presente que la directora de este episodio ha sido Jennifer Lynch, la hija del famoso director de cine David Lynch que ya se lució en The Walking Dead con el 5x14 "Spend", también muy notable. No hay duda de que su trabajo ha influido muchísimo en que este capítulo haya sido tan redondo: el ritmo ha sido adrenalítico, el humor, muy negro, y los planos especialmente cuidados. Su "toque" se percibía con toda claridad. Y es por eso que hemos tenido uno de los inesperadamente mejores episodios de The Walking Dead en mucho tiempo... y todo esto, ojo al dato, simplemente centrándonos en los -no tan- débiles habitantes de Alexandría.
¡Destripes a partir de aquí!
"JSS" comenzaba de una manera que le gusta a The Walking Dead: revelando el pasado de uno de sus personajes secundarios, explicándonos la manera en que llegó a ser lo que es hoy. Y la elegida ha sido Enid, la enamorada de Caaaarl. La chica también está como una cabra, así que podríamos decir que es una parejita que va a juego y funciona bastante bien. Con una enorme dosis de humor negro (insisto, muy presente en este episodio), nos enterábamos de la forma tan absurda en que la chica perdió a sus padres y de cómo ella quedó vagando sola por los bosques y devorando inocentes tortugas, escribiendo y recordándose a sí misma las siglas 'JSS', que al final del episodio (por esa nota que deja a Caaaarl), entendemos que significan "Just Survive Somehow", es decir, "solo sobrevive como sea". Pero no adelantemos acontecimientos.
El hecho de que los mejores de Alexandría estén lejos, dirigiendo a la horda, nos da una oportunidad de oro para patearle una buena dosis de realidad a los tiernos alejandrinos, que hasta ahora pasaban su tiempo manteniendo conversaciones marujas sobre fideos con Carol. Ella, en lo que pronto se convertiría en una rancia broma del destino, explicó a una de ellas (la petardilla malvada que cuestionó su receta y parecía haber salido de Mujeres Desesperadas) que debía dejar ese repugnante hábito de fumar... porque ya había suficientes cosas que querían matarles hoy en día. Y sería poco después, fumando, cuando Carol vería a través de su ventana cómo efectivamente esa mujer moría, sí... acuchillada. Pero la culpa fue del tabaco, y todos lo sabemos. Fumar ma-ta. ¿O hace que te maten? Tanto da, el orden de los factores no altera el resultado.
Los memes que han surgido sobre Carol a raíz de este episodio han sido épicos. Verla camuflada como una de esas sádicas de 'W', cargándose gente a puñados como si fuera una sicaria profesional, ha sido espectacular. Pero lo mejor es que Carol, a fin de cuentas, sigue siendo Carol. Ella, en palabras de la propia Melissa McBride, es una mujer con una gran sensibilidad, y si sigue intentando alejar al niño pequeño de Jessie es, precisamente, porque le duele demasiado. Ya en el 6x01 "First Time Again", me llamaba la atención que Morgan se fijase en ella. Y en este episodio el maestro de las artes marciales ha vuelto a demostrar una gran perspicacia al darse cuenta de que ella "no es así". Ella no disfruta matando, ella no puede ser como Rick Grimes. Carol sí se preocupa, y ese es su gran lastre.
En este sentido, contrapuesta a la filosofía sanguinaria de Carol The Boss, tenemos una mucho más "happy-flower" de Morgan: "vive y dejar vivir", o sea, Hakuna Matata. Según él, cada vida es valiosa. De matar nada de na-da. Es por eso que salvó al cura y dejó escapar a cinco psicópatas de 'W'... algo que ya sabemos que traerá consecuencias poco agradables. Él es el antagonista de Rick, llegado para que el contraste entre ambos ponga aún más de manifiesto lo que nuestro antiguo líder hippie-granjero es ahora. Entiendo su función, aunque no sé hasta qué punto Morgan y toda su filosofía de vida son de interés a estas alturas de la serie. ¿No bastaba con Glenn?
Impecable, lleno de acción y de tramas jugosas, "JSS" ha sido el episodio que tanto hacía falta para que los alejandrinos se sacasen la cabeza del culo, y para que Deanna -la inteligente líder que, espero, vuelva a emerger- y su hijo sean consientes de cómo es el mundo que hay tras las vallas. No hay tiempo para ser granjeros pedorros y cultivar tomates con Maggie (esto fue una coña interna de la serie hacia la etapa que ya menciono en que Rick fue granjero, ¿verdad?), porque el mundo está lleno de peligros que asaltan tu propio jardín, pisotean tus flores y te sacan las tripas. Y sentadas estas espectaculares bases y algunos misterios (¿Edin está relacionada con los chicos de la 'W'?), parece que podemos estar satisfechos: la sexta temporada de The Walking Dead promete, y mucho.
¿Qué os ha parecido a vosotros?
No estoy de acuerdo, un mundo en el que todos sean rick me parece horrible, tampoco la estupidez de morgan, hay que defenderse, pero tb buscar una vida ordenada y algo de felicidad
ResponderEliminar