Hace escasos días que se estrenó la segunda temporada de Sense8, la popular serie de Netflix creada por las hermanas Wachowski, y ni dos minutos han tardado en reaparecer los críticos rancios. Es totalmente lícito, ni qué decir tiene, que una serie te guste más o menos por los motivos que sea, pero lo que ocurre con Sense8 es demencial: muchísima gente la mira por encima del hombro, infravalora su historia y, en definitiva, la tacha de no ser buena, de no ser de calidad –y mejor no hablemos del tonillo pedante y condescendiente con que lo hacen–. Y esto me lleva a preguntarme... ¿qué requisitos debe tener, entonces, una serie para ser "de calidad"?
La respuesta a esta pregunta no es tan sencilla como podría parecer a simple vista. Podríamos pensar que los criterios para identificar si una serie es o no de calidad son puramente objetivos, tales como el cuidado de su estética y planos, la solidez de su narrativa, el buen hacer de su elenco... pero lo cierto es que el quid de la cuestión se reduce a algo mucho más subjetivo e irracional que todo eso. Pensemos, por ejemplo, en algunas de las series más valoradas y famosas de la historia televisiva. Breaking Bad, Mad Men, The Sopranos, True Detective, House of Cards, Game of Thrones... ¿qué tienen en común? Que todas ellas relatan, cómo no, las vidas de hombres blancos heterosexuales llenos de ambición que sufren mucho y luchan contra su lado más oscuro –o lo aceptan–. Y mejor no te atrevas a criticar una de ellas, tal como hizo mi compañera Doralais, o te acusarán de "no saber nada de series".
Series como Mad Men y Game of Thrones incluyen también, es justo decir, mensajes feministas y personajes de mujeres muy interesantes –casos de Peggy Olson y Sansa Stark, por no hablar de Claire Underwood o Skyler White–, pero ellas nunca toman el protagonismo absoluto. Pensemos ahora en otras series que sí son de perspectiva central femenina como Desperate Housewives (Mujeres Desesperadas en España), Orange is the New Black, Jane the Virgin, Crazy Ex-Girlfriend o Outlander. ¿Por qué estas series casi nunca aparecen entre las mejor valoradas, salvo honrosas excepciones como Buffy? Hoy en día es indudable que las series protagonizadas por mujeres están en alza (Girls, The Good Fight, Big Little Lies o The Handmaid's Tale tienen excelentes críticas), pero incluso así les sigue costando colarse en esas selectas listas clásicas de "lo mejor de lo mejor".
Aquí no entran en juego, por tanto, criterios objetivos. Lo que verdaderamente tienen en común la gran mayoría de las series "prestigiosas" es que su narrativa es eminentemente masculina y habla de los temas que la sociedad considera "interesantes": la oscuridad del hombre, intrigas políticas, asesinatos, batallas espectaculares. Es por eso que una serie de perspectiva principal femenina ya lo tiene de por sí más difícil para triunfar y ser reconocida (¿cuántas veces habéis oído llamar a Outlander "serie de mujeres" de forma despectiva?), pero es que si esas series hablan, además, de temas como la vida cotidiana o el amor, serán incluso más despreciadas, como si lo que cuentan fuese menos importante. Porque se cree que efectivamente es menos importante y, por extensión, menos interesante. Y es que, ¿cómo vamos a comparar Mad Men con Desperate Housewives? Esas "marujas" de barrio no tienen nada que hacer contra la trascendencia de Don Draper y sus épicas frases de putero triste.
Sense8, como ya dije en críticas anteriores, habla fundamentalmente sobre el amor. Y no solo sobre el amor entre blancos heterosexuales, por cierto. Cuando su Especial Navideño –del que ya os traje mi análisis– fue emitido hace unos meses, oí decir muchísimo que "no había pasado nada". Que había sido un "fanfest", poco más que una hora intrascendente de fiesta y folleteo. Y estamos hablando del mismo episodio en que el personaje de Hernando dio un poderosísimo discurso sobre la homofobia a sus alumnos; un episodio donde Sun dijo frases tan absolutamente brillantes como la de que "existimos gracias al sexo; no hay que tenerle miedo, hay que honrarlo". Sin embargo, todo eso es leído por muchos como "gratuito", como "irrelevante". Pero menuda es la gracia cuando hay un capítulo de Game of Thrones centrado únicamente en una batalla, y la crítica enloquece de entusiasmo. Porque "wow, tíos, qué calidad". Calidad. Y todo esto ocurre, simplemente, porque hay una diferente vara de medir para decidir qué es y qué no calidad.
Podríamos entrar a discutir si Sense8 hace cosas mejor o peor, como también podríamos debatir las torpezas de Game of Thrones, pero lo cierto es que la percepción social mayoritaria es la de que, para empezar, son dos series que juegan en "ligas diferentes". Por tanto, los críticos no valoran de igual forma a una serie que a otra, porque se da por hecho que Sense8 es una serie más "de broma" que no hay que tomarse tan en serio; todo esto lleva a que se la infravalore enormemente, en muchos casos de forma injustificada.
Y es que Game of Thrones habla, en definitiva y como explicaba, de temáticas que nuestra sociedad valora y considera "épicas" (crueldad desmedida, dragones, grandes batallas de pijos egocéntricos), mientras que Sense8 habla en un tono más jovial y directo, sin esa pomposidad y grandilocuencia juegotroniana que tanto gusta a los críticos exquisitos, de "temas menores" (amor, sentimientos... ya sabéis, cosas de chicas jeje) que la llevan a ser tomada no tan en cuenta por la crítica. Pero dejadme que os diga una cosa: ni menores ni pollas en vinagre.
El discurso de Hernando fue tan grandioso, o más, como cualquier batalla de Poniente, y Bree van de Kamp es un personaje tan valioso como Don Draper. La calidad es una cuestión de perspectiva, y tal vez la nuestra es más sesgada de lo que creemos y está influida por la sociedad machuna en que vivimos. Porque hay mucho que criticar a Sense8, no lo niego, pero no puedo dejar de pensar que la serie tiene muchísimos puntos fuertes y bellísimos que no están siendo valorados como se merecen. Quizá falte en el centro de la trama un hombre blanco hetero sufriendo mucho y siendo afectado por la oscuridad del mundo para que la crítica se la tome en serio, ¿no creéis? Esa parece la auténtica fórmula del éxito, de la calidad™.
Si en #Sense8 los personajes no estuvieran corriendo/peleando/matando/desnudándose/de-fiesta/follando cada episodio duraría 5 minutos.— Maldito Bastardo (@MaldytoBastardo) 5 de mayo de 2017
Y es que Game of Thrones habla, en definitiva y como explicaba, de temáticas que nuestra sociedad valora y considera "épicas" (crueldad desmedida, dragones, grandes batallas de pijos egocéntricos), mientras que Sense8 habla en un tono más jovial y directo, sin esa pomposidad y grandilocuencia juegotroniana que tanto gusta a los críticos exquisitos, de "temas menores" (amor, sentimientos... ya sabéis, cosas de chicas jeje) que la llevan a ser tomada no tan en cuenta por la crítica. Pero dejadme que os diga una cosa: ni menores ni pollas en vinagre.
El discurso de Hernando fue tan grandioso, o más, como cualquier batalla de Poniente, y Bree van de Kamp es un personaje tan valioso como Don Draper. La calidad es una cuestión de perspectiva, y tal vez la nuestra es más sesgada de lo que creemos y está influida por la sociedad machuna en que vivimos. Porque hay mucho que criticar a Sense8, no lo niego, pero no puedo dejar de pensar que la serie tiene muchísimos puntos fuertes y bellísimos que no están siendo valorados como se merecen. Quizá falte en el centro de la trama un hombre blanco hetero sufriendo mucho y siendo afectado por la oscuridad del mundo para que la crítica se la tome en serio, ¿no creéis? Esa parece la auténtica fórmula del éxito, de la calidad™.
Isidro López (@Drolope)
Hola. No estoy metido en el mundo de la crítica de series (quiero decir, no tengo Twitter), así que solo sé de estas críticas por tu artículo. Por mi parte, he disfrutado Sense8 como hace mucho tiempo no disfrutaba una serie y estoy encariñado con los personajes.
ResponderEliminarSí, creo que a veces tiene cabos sueltos, que en algunos momentos se queda en lo "fácil" de lo visual (esas fiestocas a todo dar) o que los protagonistas son demasiado "buenos" (hay que hacerle un monumento a Amanita), y varias cosas más, pero esos defectos que toda serie tienen no hacen que tenga poca calidad.
Tiene virtudes por lo creativo de la historia, por su equilibrio para dosificar a tantos protagonistas, por los temas serios que toca sin hacer drama (salvo cuando lo hace) y sobre todo por su inmenso OPTIMISMO. ¿Acaso no podríamos ser tan generosos y valientes como Amanita al menos unos cuantos días a la semana? Lloré en cierto capítulo de la segunda temporada y me he reído en todos. Lito me irrita cuando se ahoga en un vaso de agua (Sun se lo explicó) y me han hecho sufrir con algunas escenas violentas. Es decir, al menos conmigo han logrado el objetivo de interesar, divertir, emocionar y pensar, que es lo que espero de una serie. ¿Soy "fácil"? Tal vez, pero no me importa.
Por cierto, también rompo una claymore por Outlander. Claire me parece un personaje muy bien logrado gracias a la interpretación de Caitriona Balfe y los que la acompañan solo se quedan atrás porque Claire es la protagonista y es Caitriona. Es mi serie preferida.
Creo que la gente gusta demasiado de "derribar" cosas que a otras personas les gustan, solo porque hay diferencias de gusto o ganas de tener razón. O porque se muere por el MásCínicodeTwitter (TM). Los espectadores de series tenemos todo el derecho de pedir calidad, pero también el deber de entender que este es un criterio subjetivo y variable y más el deber de respetar a la gente con diferentes opiniones.
Y luego de todo esto, no sé qué haré hasta la próxima temporada de Sense8 :(
Saludos y gracias por escribir.
Hola Roberto,
EliminarSuscribo 100% todo lo que dices. Sobre las críticas que ha habido hacia Sense8... pues hay de todo, sinceramente. Hay mucha gente contenta, por supuesto, pero también muchísima gente que mira a Sense8 un poco por "encima del hombro" como digo en el artículo, como si lo que hace fuera fácil, de poca importancia. Como si la serie solo fueran orgías sensoriales muy molonas, chistes y poco más. Por eso decía que creo que no se valora lo suficiente todo lo que hace Sense8, que es mucho más que eso. Lo mejor de que no tengas Twitter es que te pierdes todas estas tonterías... ;)
Gracias a ti por tu observación, me ha parecido muy interesante.
Saludos!
Yo creo que el prejuicio tiene que ver tb con ciertos canales,los programas de la tv de pago en EEUU tienen cierto estatus,aunque muchas sean horribles,es como que está de moda ver series que no ve nadie,es cool,y se menosprecia los programas populares que la gente elige.es un nuevo deporte pegarle a the big bang theory,pero por algo es el programa más visto,algo atrae a la gente,y creo que eso merece respeto.
ResponderEliminarOtro tema es la constante ponderación de ciertos actores sobrevalorados,solo por participar de series" con onda",cuando en series populares hay actores del carajo. Me quedo mil veces con un James spader o una Allison jenney antes que con Brian Cranston o cualquier miembro del elenco de got o mad men
Hola Gonzalo,
EliminarEso que apuntas también es muy cierto y podría dar para otro debate. Las series con mucho presupuesto, de HBO y de canales "de prestigio" ya parten con más ventaja, con más predisposición de gustar a la crítica, pero lo cierto es que no hace falta tanta "plata" para hacer una serie de calidad... ahora me viene a la cabeza Paquita Salas, una serie española de solo cinco episodios pero muuuy buena. Pero sí, es bastante cierto eso del "postureo" que comentas, lo he visto en más de una persona... ;)
Saludos!
Me tragué la segunda temporada de Sense8 en dos días (viernes y sábado), y desde entonces estoy encabronadísimo justo con este tema. Es una seriaca tremenda, y creo injustísimo minusvalorarla justamente con lo intensa que es. Tengo un amigo súper cinéfilo y súper seriéfilo, que justo estudia para ser guionista de películas, y concuerda conmigo: algunas escenas de la segunda tmeporada son las más intensas (desde un punto de vista emocional, de involucrar al espectador) que ha visto NUNCA.
ResponderEliminarY eso, me encabrona lo minusvalorada que está, y por eso MUCHÍSIMAS GRACIAS por escribir esta entrada. Plasma justo (casi) todo lo que pienso sobre las malas críticas sobre Sense8. Justo sobre el tema de la violencia y tal creo que hay un apunte que dar: Sense8, a diferencia de GoT (y de muchísimas series con escenas de sexo), muestra la sexualidad, las relaciones sexuales y el amor desde una óptima diametralmente opuesta a la social mayoritaria: no como violencia, conquista, guerra ("en la guerra y en el amor todo vale"), sino como compartir, conocer y disfrutar. Nadie dirá, por supuesto, que le molesta que en esta serie no se realcen positivamente los modelos heteronormativos-misóginos acerca del sexo, la sexualidad y el amor, pero je. Mucho je.
Gran entrada. Al final la calidad parece que es simplemente lo que gusta al varón heterosexual blanco. Me niego a que sea así: Sense8 es una serie de buena calidad, y merece ser reconocida como tal.
Y como último apunte, qué gracia el tweet de Maldito Bastardo. Cambias "Sense8" por "GoT" y tiene el mismo sentido. Parece que correr, follar y desnudarse solo molesta cuando lo hace alguien incorrecto y de una forma no bien vista (pero que es, leches, mil veces más sana que la que mayoritariamente se vende como "la buena").
Hola Alex,
EliminarMuchas gracias! A mí también es algo que me jode mucho (creo que quedó claro durante la entrada XD) y realmente necesitaba sacármelo de dentro. Me alegra saber que no estoy solo en esto. :)
Eso que comentas de JdT es TAL QUE ASÍ. Allí el sexo se muestra como un juego de poder, mientras que Sense8 lo muestra como una forma totalmente lícita de conectar con otra persona, ya sea tu novia/o de toda la vida o alguien recién conocido. Solo que claro, supongo que no es tan "molón" pintar el sexo de forma tan luminosa, en lugar de la forma oscura y lúgubre que elige Juego de Tronos... eso vende más, porque eso es más "complejo", más "interesante". Pero dile a tu amigo que concuerdo con él: la emoción que consigue Sense8 no es fácil de plasmar en una serie. De "gratuita" y "simplona" no tiene nada.
A mí me quedan aún tres episodios para terminar la temporada, pero de haber tenido menos trabajo me la habría ventilado tan pronto como tú sin duda... ;)
Saludos!
Lo único que leí, fue la faltota de ortografía con la que abres tu artículo. Después de eso, todo lo demás queda desacreditado en automático.
ResponderEliminarDecir o escribir 'En base' es COMPLETAMENTE incorrecto. Te invito a que estudies y revises un poco más tu redacción antes de hacer cualquier publicación.
Saludos
Hola Raúl,
EliminarTienes razón en que habría sido más correcto decir "con base en", en lugar de "en base a", pero la expresión que yo uso está mucho más extendida y hay quien dice que no debería censurarse:
http://www.fundeu.es/recomendacion/con-base-en-mejor-que-en-base-a/
Pero bueno, gracias por tu observación. Siempre estoy abierto a críticas constructivas para mejorar.
Saludos
Energúmeno. Escribes tan bien que deberías poseer el asiento "W" minúscula, un artículo de opinión en Elpais.com y un blog sobre batallas de siglos pretéritos. Energúmeno. Sin ánimo de ofensa su más fiel servidor. Maese Raúl. ¡Ah sí! La serie. La putísima hostia.
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