Ha pasado casi una década para
que el sueño de muchos fans de Gilmore
Girls se hiciese realidad: volver a ver a todos sus personajes reunidos en
uno de los pueblos con más encanto de la geografía estadounidense, Stars
Hollow. Winter, la primera de las cuatro
estaciones por las que Amy Sherman-Palladino hace el recorrido de la historia,
es un episodio especial, mágico, donde la nieve no transmite frío dado que el
corazón de las Gilmore sigue latiendo más que nunca.
Lo primero de todo es deciros lo encantada que estoy al traeros las reviews de cada uno de los episodios de
este revival. Gilmore Girls es
una de mis series favoritas, un happy
place que tiene un lugar de honor en mi corazón, por lo que volver a ver a
todos de vuelta ha sido un verdadero placer y hablar sobre ellas en el blog es
un sueño hecho realidad. Para ir en orden, recorreré a las tres grandes
protagonistas y todo lo que les rodea.
El corazón se me rompe |
Emily nunca ha sido un personaje al que le tenga especial cariño,
aunque no niego que ha tenido momentos de absoluta grandeza. Sin embargo,
si yo fuese Lorelai y tuviese una madre como la suya, no me hubiese quedado
accidentalmente embarazada y hubiese huido de allí, sino que le hubiese cortado
las venas a alguien. No sé si a Emily o a mí, eso todavía lo estoy pensando. En
este revival, Emily ha sufrido uno de los peores golpes que le ha pasado en la vida,
la muerte de su marido Richard, y está intentando seguir adelante como puede.
El funeral, ocurrido cuatro meses
antes del momento en el que volvemos a verlos, es uno de los momentos más lacrimógenos de todo el episodio, con
familia y amigos reunidos para darle el último adiós a un gran hombre y,
sinceramente, a una persona a la que le teníamos muchos un cariño enorme.
Richard Gilmore se ganó mi amor desde la primera temporada al intentar
tímidamente conectar con su nieta cuando ni siquiera sabía cómo, defendiendo a
su hija y ayudándola si tenía la oportunidad, y formando un tándem inolvidable
junto a su mujer. Cuando me enteré del fallecimiento de Edward Herrmann, sentí
que una parte de mi corazón se rompía porque siempre me ha parecido una gran
pieza de la serie, un señor entrañable, y este mazazo me ha sentado como si
perdiese a mi propio abuelo. Es duro no verle leyendo el periódico o en su
despacho, y este sentimiento nos acerca a las Gilmore un poco más. En el funeral podemos ver objetos que nos
sirven de referencias directas a la serie original, como el famoso disco de
Chuck Berry que Rory le regala y le lleva al hospital durante la séptima
temporada.
Es una larga historia, Emily |
A pesar de la tristeza, Emily se muestra entera y con cierta
fortaleza, saludando a los que han ido a la recepción de después, seguida por una Rory que me recuerda a su
etapa en el DAR, controlando que todo salga bien y que su abuela no se
desplome de la tristeza. Un detalle sorprendente es el abrazo entre Luke y Emily. ¿Será por el dolor, por
agradecimiento o porque Emily ha sabido apreciar al novio de su hija con el
paso del tiempo? Ese momento ya me da la sensación de que Emily ha crecido un poco y es sólo el comienzo. Otro momento es el
de Berta y cómo poco a poco su
familia se ha instalado en la mansión Gilmore. Emily se muestra encantada con todos ellos aunque extrañada al mismo
tiempo por el lenguaje incomprensible que hablan. Este gag, que ya ha sido recurrente en Winter, tiene dos puntos de
vista: el primero es que Emily es
más transigente con sus criadas y que los comentarios son una broma; el
segundo punto de vista es que es un poco
racista todo en cuanto a Berta. Vale, no entiendes lo que dice ni ella a ti
pero, ¿hay que traer a una persona que trabaje en la ONU para ver si lo
identifica? ¿No es demasiado? De todas formas, ahí puede radicar la gracia del
asunto: Amy Sherman-Palladino hace una
crítica en tono de humor sobre el asunto y tú o te lo tomas a bien o te lo
tomas a mal. En mi caso, me lo tomo a bien pero no voy a negar que el tema
se puede hacer un poco repetitivo. Volviendo a la recepción, hay dos grandes
momentos que no se pueden quedar sin mencionar. El primero es la ronda de recuerdos agradables y
especiales por parte de los amigos de Richard sobre él. Me parece un poco
lo peor que Lorelai esté dormida delante de todo el mundo. Entiendo que haya
bebido demasiado pero, tía, si te vas a quedar frita, vete a una habitación
porque me parece hacer el ridículo a gran escala. Hay que tener un saber estar
y eso es de Ser Persona 101. Después de esto, estaba claro que todo iba a ir a
peor con la historia que cuenta la propia Lorelai. Entendemos que Richard era un padre ausente, que no te llevó al zoo o
al parque pero, ¿era tan difícil acordarse de algo bueno que hiciese? ¡Te
defendió de los ataques del padre de Christopher cuando les presentaste a su
nieta! ¡Te ayudó con el seguro de tu hotel! ¡Se sentía orgulloso de ti por cómo
habías salido hacia adelante! ¡¿En serio, Lorelai, era tan jodidamente difícil
de contar algo bueno sobre tu padre cuando yo lo podría haber hecho mejor y no
tenía ninguna relación con él? ¡Wow!
El segundo momento importante es la
conversación entre Emilly y su hija, donde la primera le reprocha que siempre
se haya salido con la suya y que esta gran metedura de pata estaba planificada
sin dudarlo. Y aquí me divido aunque estoy más de parte de Lorelai que de
su madre. Es cierto que Lorelai siempre
se ha salido con la suya, o que siempre ha querido hacer las cosas como
ella quería porque su infancia y parte de su adolescencia se sintió encerrada
en una cárcel, por lo que el resto de su vida ha intentado vivir bajo sus
propias reglas y deseos, cosa comprensible. También es cierto que Lorelai, en el fondo, me parece poco
agradecida. Podría haber estado mucho peor, podría haber tenido unos padres
abusivos, maltratadores, pero lo único que querían era su bien y que cumpliese
las expectativas, como todos los padres – sí, todos los padres tienen
expectativas hacia sus hijos y, cuando no las cumplimos, se defraudan, pero es
el precio a pagar, es el bofetón obligatorio que todo padre debería llevarse al
comprender que su hijo tiene su vida y que la tiene que vivir como crea
oportuno –. Lorelai podría haberse salido del plan de todas formas, haber
hablado/discutido con sus progenitores y tener una mejor relación con ellos.
Por otro lado, creo que Emily se ha
pasado doscientos pueblos al decir que la gran cagada de su hija era
premeditada. Lorelai no es una mala persona aunque sea egoísta – las
circunstancias la hicieron así –, y menos como para planificar cómo cargarse el
velatorio de su padre y humillarle. En serio, Emily, no todas somos tan hijas
de puta como tú, chata.
Por favor, una de abrazos por aquí |
Pero, tras este tropiezo hace
cuatro meses, las cosas vuelven poco a poco a su cauce. Volvemos a las cenas semanales o, en este caso, más esporádicas que
otra cosa, con Kirk a la mesa, uno
de los mayores WTF’s de esta serie
pero que me parece hasta una genialidad con la matriarca preguntando que quién
cojones es ese, o lo de la silla de
Richard, en la que no puede sentarse nadie. Este último gesto me parece tan
natural, entrañable y lacrimógeno que ya llevamos dos cajas de kleenex gastadas en este episodio – Amy,
te vamos a pasar la factura de los kleenex.
Avisada quedas –. Tampoco podemos
olvidar el cuadro enorme que encarga de él. “Quería algo dramático”, le
dice a su hija y a su nieta y sí, Emily, te has lucido, hija mía. Es cierto que
es pasarse bastante, pero estoy con Emily en que un gran hombre con una gran
presencia se merece un cuadro como aquel. ¿Exagerado? Totalmente, pero con
Emily todo es exagerado. No es hasta el
final del episodio cuando vemos a una Emily mucho más humana y totalmente
perdida que contrasta con el toque de humor con el que se presenta la
situación: ella misma vestida con una
camiseta y unos vaqueros de su hija ya que ha decidido quedarse con aquello
que le trae alegría. Emily le confiesa a
Lorelai, con una copa entremedias, que no sabe cómo vivir su vida. Y,
sinceramente, es normal. Emily siempre ha sido la señora de su casa, la mujer
florero cuando había que serlo y la anfitriona de toda fiesta que organizase
pero, sobre todo, el mayor apoyo de su marido, siempre a su lado y, ahora que
no está, es normal y lógico que no sepa qué hacer. Lo bonito del momento es que Lorelai la comprende porque ella misma
está pasando por algo muy parecido. ¿Quién iba a pensar que Richard Gilmore
desaparecería algún día? ¡Era impensable! Y ahora enfrentarse a la realidad es
el reto más importante que tiene la matriarca de la familia, encontrarse a sí
misma y continuar, porque no queda de otra. Es entrañable que Lorelai aconseje a su madre y le diga que vaya a una
psicóloga – con referencia a The
Sopranos incluida, lo que me hace querer a estos personajes todavía más –;
quiere que siga con su vida y si a lo mejor necesita ayuda, quién mejor que
alguien que sepa sobre el asunto. Lo que
me parece de traca es que, después de tantos años, Lorelai caiga en una de las
trampas de su madre. Lo achaco a que está blandita por verla así pero,
hija, que Luke se dé cuenta antes que tú de la boca del lobo en la que te metes
me dice que sí, estás desentrenada.
♥ Cuquis ♥ |
En lo que no anda desentrenada
Lorelai Gilmore, o mejor dicho Lauren Graham, es en seguir el ritmo frenético
que siempre ha tenido esta serie. Desde
ese comienzo con el fondo en negro y las voces que nos llevan a un pasado para
algunos más remoto que para otros, con la primera interacción entre Luke y
Lorelai hasta pasando por algunas frases míticas de las siete temporadas – el colapso
de Paris al saber que no va a ir a Harvard por haberse tirado a un tío sigue
siendo TOP –, se nota lo especial que es este episodio y te prepara para lo que
viene. Lorelai siempre ha sido, si no el número uno, uno de mis favoritos sin
dudarlo. Sus referencias imparables a la cultura pop es algo que me hace sentir
un amor por ella que pocas veces he sentido y es un modo de conexión con el
personaje. Lorelai siempre se ha caracterizado por ser la más inmadura del dúo
con Rory pero creo que eso podríamos tacharlo. Sí, tiene cierto punto de
inmadurez, pero creo que alguien así no le hubiese echado ovarios a la vida
como ella lo ha hecho, y no podemos negar que sí ha tenido momentos de adulta
total. Tras casi diez años sin saber de ella, nos esperamos que haya crecido,
que haya aprendido de los errores del pasado, pero me da que a veces no es así.
Los problemas de comunicación entre
Lorelai y Luke que tanto nos llevaron por la calle de la amargura en la sexta
temporada siguen ahí, después de DIEZ años. Y estos problemas se ven con el tema de los niños sí o los niños no
provocado por la regañina de Emily. Personalmente, aunque a todos nos haría en
cierta manera ilusión, me parece tarde que quisieran tener hijos, incluso sacar el tema me parece que ya no viene al
caso. ¿Tener hijos con casi 50 años? In
my opinion, es un poco tarde, sobre todo porque con esa edad aguantar a un
mocoso corriendo de aquí para allá dando el coñazo es too much. Tampoco es que aplaude tener hijos con 16 – yo no lo
haría ni de coña –, pero creo que hay que mirar por ese niño y tener en cuenta
que, aunque no le quieras frenar en un futuro, a lo mejor tu salud o tu edad sí
lo hacen. Si no han tenido hijos es por
dos factores: su comunicación de mierda y porque tampoco los han querido en el
fondo. Al final, cuando hablan sobre el tema – que son cinco minutos de
reloj –, se dan cuenta de que están bien como están y que si en algún momento
quisieron, ese barco zarpó hace tiempo.
TOP |
Lo bueno de este asunto es que
nos ha devuelto a Paris Geller, la
mujer que se quería comer el mundo y que vaya si lo ha hecho. Paris tiene su propia empresa, Dinasty
Makers, donde ofrece los servicios de madres de alquiler para parejas con
problemas de concepción. Paris sigue siendo como era: ambiciosa, con muy mala
hostia, pero, al mismo tiempo, sabe quiénes son sus amigos y los trata mejor
que al resto. No voy a negar que me ha
llegado al corazón que considere a Lorelai como su segunda madre o ese “Es
difícil seguirle la pista a nuestra chica, ¿verdad?” refiriéndose a Rory. Sin duda alguna, Paris se come al resto de la
gente en pantalla ya que, aunque quiera sonar dura, es lo más gracioso que ha
tenido esta serie siempre. El momento
escaneo de los huevos de todo hombre viviente que se cruzaba con ella ha sido
mortal y por casi me da algo cuando ha mencionado a Neil Patrick Harris.
Amy Sherman-Palladino se ha quedado a gusto haciendo referencia a todo lo que
está de moda últimamente y, no lo vamos a negar, NPH es uno de los hombres gays
con familia e hijos referente en la sociedad estadounidense así que tenía que
estar. Siguiendo con Lorelai – volveré más tarde con Paris –, al final el tema de los niños queda zanjado
en otros cinco minutos, lo cual me parece un poco absurdo, pero que termina
con algo que no iba a ninguna parte.
Hay cosas que no cambian |
En cuanto a la relación madre e hija, no se ha explorado gran cosa,
excepto que Rory no para quieta y que Lorelai se alegra por ella aunque, en el
fondo, la echa bastante de menos. En lo que sí se ahonda más es en la relación de Lorelai con Michel. Por primera vez en toda la serie se dice
explícitamente que Michel es gay y lleva unos años casado con un hombre,
Frederick, el cual quiere tener niños pero Michel no está muy por la labor.
Se nota mucho la libertad que Netflix le ha otorgado a Amy Sherman-Palladino ya
que en una cadena como The WB/posteriormente The CW a principios de los 2000,
eso no ocurría ni por asomo. También se puede ver en que tienen permitido decir
“sexo” o el “holy shit” que suelta
Lorelai al ver a su madre en vaqueros. Siguiendo con los dos socios, su relación es más estrecha que nunca
porque Sookie lleva de “viaje sabático” un año, trabajando con Dan Barber, un
chef de prestigio, en una granja perdida de la mano de Dios. Por lo que
ahora el gag que han introducido es
que por el Dragonfly Inn han ido pasando una serie de chefs reconocidos y ninguno
ha caído en gracia con la jefa Gilmore. La ausencia de Sookie ya era del todo
conocido por la apretada agenda de Melissa McCarthy, así que se han tenido que
inventar una excusa para que ella no esté. Sobre esto se nos muestran dos posturas, la rabia que siente Michel por la “traidora” de Sookie, que les ha
dejado con los pantalones bajados, y la
mezcla entre esperanza porque vuelva y el respeto por la decisión de la chef
por parte de Lorelai. Comprendo ambas partes y por ahora lo dejo correr un
poco. Sookie nunca ha sido un personaje que me llamase especialmente la
atención, pero sí que me gustaba la relación que tenía con Lorelai, por lo que
tampoco me voy a rasgar las vestiduras si está a tomar por saco girando a la
izquierda en el quinto pino.
Una de las cosas en las que más interesada estaba era en la evolución
de Rory o, mejor dicho, en qué situación estaría ahora, dado que yo dentro
de nada también seré oficialmente periodista. ¿Se habrían cumplido sus sueños?
Rotundamente NO. Rory es una periodista freelance que anda publicando artículos
en los medios que puede. Va buscando historias, allí donde la brisa la
lleve, luego las recoge y las intenta colocar en medios impresos y digitales. El sueño de ser corresponsal se
fue a tomar por culo con la crisis económica, una nota que hace más real lo que
estamos viendo. Siento decirlo pero creo
que no puedo decir nada bueno de Rory. Siempre me ha caído más o menos
bien, y en ocasiones me he sentido en conexión con ella por algunas
experiencias, como al acabar su paso por Yale, pero no puedo negar que Rory es mucho más inmadura que su madre, o
que a ella no le ha salido de todo su higo madurar, y que puede ser lo peor si
se lo propone.
♥ Alex Kingston ♥ |
La primera bofetada que le daría
sería ya al principio del episodio, cuando le llaman los de Condé Nast e,
inutilizando su “magnífica” inteligencia, se dedica a no parar de andar aunque
pille cobertura y podría hablar perfectamente con su interlocutor. No, ella le
grita que va a correr hacia los árboles, para que se quede más flipando todavía
acerca de a quién cojones le van a dar espacio para publicar en alguno de sus
medios. Rory, te hemos pagado Chilton y
Yale – yo me incluyo en su educación aunque tenga menos edad que ella – para que pienses, para que cuando cojas
cobertura te pares aunque sea en mitad de la acera y atiendas la llamada, no para
que hagas el canelo subida a una banqueta mientras le pasas repollos al
personal. No me extraña que al final aplacen la reunión ante semejante
espectáculo. Uno de los nuevos detalles que vamos conociendo sobre Rory, aparte de su inexistente
inteligencia, es que ha estado viviendo
en Brooklyn, pero ha decidido dejar su piso ya que pasa poco tiempo en él. Esto le lleva a sacar toda su mierda
aburrida – palabras casi textuales de su madre – e ir mandando cajas a todo el mundo porque es muy lógico que todas tus
pertenencias estén distribuidas por todo el mundo. Una de las peores cosas
que he escuchado es que a ella le parece
emocionante esta nueva etapa donde no tiene donde vivir, no tiene que hacerse
cargo de un alquiler, está sin ataduras, sin raíces y va a dejarse llevar.
Es un mantra tan hippie que no va con el carácter de Rory. ¿Dónde quedó aquella
chavala que hacía listas de pros y contras hasta para elegir las bragas? ¿Dónde
quedó la muchacha que tenía su vida perfectamente planeada? Esta pregunta intentaré
contestarla más adelante pero, por ahora, os podría decir que Rory ha sufrido un cambio de personalidad
absurdo. Es cierto que la gente cambia pero, ¿y esto? Menos mal que la
única que parece reaccionar es Emily,
la cual intenta despertar tanto a su
nieta como a su hija, quien aparentemente no tiene que decir nada al respecto,
de esta situación. No, no es normal que con 32 años no tengas un sitio
donde vivir, no busques una estabilidad, que le mandes cajas con tus enseres a
todo cristo. No, hija mía, no es normal.
¿Es Logan o es Cary? Es difícil decantarse |
El mayor problema que le veo a Rory es que la encuentro muy estancada
en un gran momento que fue la publicación de su artículo en New Yorker, cosa similar que le pasa a
Luke con ella. Sí, publicaste un artículo en una revista de prestigio, pero
sólo es uno. Cuando tengas quince me llamas y te regodeas lo que quieras, pero
tienes que seguir adelante. Rory dice que tiene varios proyectos en curso, pero
no hay nada seguro y así no hay forma de comer ni de encontrar una estabilidad
necesaria para que no te dé un infarto tan joven. Un momento sobre el que hay
que hablar es el del claqué antiestrés.
Vamos a ver, ¿a quién cojones se le
ocurre bailar claqué a altas horas de la madrugada mientras el resto de la
gente duerme? ¿Porque tú no puedas dormir tienes que joderle el descanso a
los demás? ¿Esta chica piensa? Entiendo que Amy Sherman-Palladino haga una
crítica sobre el jogging, el spinning, el tejer bufandas interminablemente
largas, etc., una serie de actividades que se ha buscado la juventud para
desestresarse y que pueden ser “estúpidas” pero, ¿tiene que ser con Rory
haciendo gilipolleces? ¿En serio que esta chica fue a Yale? También podríamos
hablar del claqué antiestrés, lo absurdo que suena y que se ve, el porqué tiene
que existir y la gente dar el coñazo con ello, pero eso lo dejamos para otra
ocasión. Otra cosa que se nos muestra es que Rory sigue siendo nula en cuanto a las interacciones sociales y, como
ejemplo, lo que pasó con Gail Collins.
Estamos hablando de una periodista que conoce a mucha gente y que, seguramente,
no se va a acordar de tu cara. Por mucho café que lleves en las venas,
contrólate, coño. No es tan difícil. Te acercas amablemente, te presentas,
cuentas dónde os conocisteis y sigues con la conversación. ¿De verdad hay que
enseñarle a interactuar con otros humanos? Lorelai, haber tenido un perro
antes. Te hubieses ahorrado Chilton y Yale. Lo que más me llama la atención y rechina es todo lo relacionado a sus
relaciones personales. Por un lado tenemos a Paul – Patric Edelstein en The Good Wife, amigos –, el novio con el que lleva dos años y no se
acuerda de él. ¡Wow, esto no lo
esperaba! Lo peor es que en vez de
cortar con él, se le olvida su existencia y que tiene que terminar la relación
y entramos en un círculo vicioso que deja de tener gracia a la segunda broma.
¿Es el tema Paul una broma de muy mal gusto? ¿Desde cuándo Rory se ha
convertido en lo peor de lo peor? Por lo que recordamos, ella era una chica que
quería compromisos, relaciones estables, incluir a sus novios en la dinámica
familiar, etc. ¡¿Pero esto?! Entiendo que sea una broma pero me resulta
bastante penoso en general. Paul está ahí para que la gente se ría de él. Muy
maduro, sí señor.
#TeamParis forever and ever |
Por otro lado, Rory viaja a Londres para dos cosas:
empezar a escribir un libro sobre Naomi
Shropshire, protagonista de su famoso artículo del New Yorker, interpretada por la fabulosa Alex Kingston; una mujer excéntrica, un poco caradura en
sus formas, alocada, pero
divertidísima; y por otro lado para tirarse
a Logan y, ay, amigos, quién no lo haría. Tener que esperar una hora para
que salga Logan ha sido duro – mi corazón de fangirl sufre –, pero ha merecido la pena. Logan vive en Londres y tiene un apartamento moderno, muy a su
estilo. Por lo que se deja entrever, la
relación entre Rory y Logan es muy casual, dado que le dice que “teme”
encontrarse cosas de otras mujeres allí, a lo que él le contesta que jamás le
haría eso. El lema “lo que pasa en Las
Vegas, se queda en Las Vegas” es el referente de Rory, algo que no va para nada
con su personalidad, y menos que le ponga los cuernos a su novio por mucho
que ella no se acuerde de él. ¿Por qué estos niveles de absurdez? ¿No sería más
sencillo, sano y justo para el pobre Paul, del que no se acuerda ni su padre, que
cortases con él? Y, por si nos pareciera poco, le miente a su madre diciéndole que en Londres se queda con una amiga
llamada Didi. Me parece que hay demasiada gilipollez junta así que pasemos
a Paris, quien va a Stars Hollow y allí se encuentra con la tonta número uno de esta
serie, Rory Gilmore. Paris sigue siendo
lo mejor, desde sus caras al ver tocar a Hep Alien – ¡hurra! – hasta su conversación con su amiga sobre
Doyle, quien se ha convertido en guionista
y se viste como un veinteañero,
motivos suficientes para que Paris haya dicho basta y se hayan separado. Por
supuesto, aquí una que se declara #TeamParis
si hay que elegir bando, aunque Doyle no me ha caído nunca mal.
En cuanto al resto del pueblo, las cosas siguen bastante estables en Stars
Hollow. Por un lado tenemos a Kirk,
al cual le han encasquetado un cerdo
para que no se reproduzca – y esto lo deberíamos de aplaudir porque menuda
de la que nos han salvado – y el cual sigue creando sus propios puestos de
trabajo, como con la copia de Uber pero escrita como Öööber; por otro, tenemos a Taylor,
quien sigue igual de insoportable
pero que le hemos visto llegar a un nivel de hartazgo en este episodio que
hasta Luke ha tenido un gesto precioso con él. También hemos visto a Miss Patty, quien ha adelgazado muchísimo desde la última vez que la vimos y eso que
ya había bajado unos kilos; a Gypsy,
quien no ha cambiado nada – Rose
Abdoo se ha mantenido bastante ocupada en este revival, ¿verdad? –; al trovador, que también ha vuelto con el
resto de la tropa; y a Lane, quien se ha quedado muy, muy estancada. Sigue teniendo a Zach, que parece que
un ascenso es lo peor porque ya no es cool
ni rock n’ roll – por favor, creced
–, y a sus hijos, Steve y Kwan, pero
no ha salido de donde la dejamos en la séptima temporada. Una pena.
Para ir terminando, me gustaría
destacar que el episodio está escrito y
dirigido por la propia Amy Sherman-Palladino porque, si te dan la
oportunidad de hacer algo, no hay nada mejor que hacerlo como tú quieras y que
seas tú quien lo haga. El capítulo, en general, me ha gustado bastante. Volver
a ver a todos ha sido realmente especial y tener tan presente a Richard Gilmore
ha hecho que las lágrimas se desborden. ¡Qué jartá a llorar, madre de mi vida!
Ese “In memory of Edward Herrmann” ha
sido demasiado también. Se le echa mucho de menos.
Por mi parte nada más excepto
animaros a que dejéis vuestros pensamientos, sentimientos o cualquier cosa que
se os haya pasado por la cabeza al ver este primer episodio del esperadísimo revival de Gilmore Girls, y os cito en la siguiente review. ¡Nos vemos en Spring!
♥ Han vuelto ellas ♥ |
Pensamientos varios:
- La referencia a Batman v Superman por parte de Rory es genial. Tampoco falta la pulla a Marvel por parte de Lorelai.
- “Tienes más móviles desechables que Omar Little”. Te adoro, Lorelai Gilmore.
- “I smell snow”. Los poderes mágicos de Lorelai siguen intactos.
- La casa toda iluminada es preciosa, al igual que el pueblo entero.
- Paul Anka está viejito pero sigue igual de mono. Y vestido de Luke ni os cuento.
- Luke se comporta como un padre orgulloso con el artículo de Rory en New Yorker.
- El deseo de Lorelai de tener una televisión en la habitación se ha cumplido.
- Lorelai organizando sus revistas en función de las hermanas Kardashian. Touché.
- “Por los amigos ausentes”. Las lágrimas son reales.
- Las normas del Luke’s Diner se han actualizado. Hay Wi-Fi y los menús son nuevos.
- “Luke, tienes que controlar a tu mujer”. Kirk, me acabas de dar todo el asco.
- La canción de The Carpenters es muy Amy Sherman-Palladino.
- ¡Jason Stiles! No me esperaba esto.
- Luke arreglando cosas en el velatorio es tan de padre, y tan inapropiado.
- ¡¿Desde cuándo coges un avión el mismo día del funeral de tu abuelo?!
- ¿Desde cuándo Emily Gilmore tiene una cuenta de correo electrónico?
- Que no se nos olvide April, por Dios bendito, que está en la MIT. Insoportable y ni aparece.
- Louise Goffin, hija de Carole King, interpreta a la hermana del trovador.
- ¿En qué sala de espera no hay una puta mesilla para dejar el café?
- Aparte de las ya comentadas, hay referencias a: Lena Dunham, Trainspotting, Regreso al Futuro, Buffy, The Vampire Slayer, etc.
Muchas muchas muchas gracias por hacer una review por episodio! 😍 honestamente no tengo nada más por agregar, no se te escapó nada! A mi me gustó mucho el primer episodio del revival WINTER. Soy, honestamente #teamlogan y no me pareció correcto el tipo de relación que lleva con Rory quien esta demasiado diferente con respecto a donde le dejamos en la temporada 7.
ResponderEliminarMe da mucha impresión que Rory y no esperaba este cambio del personaje.
París siempre siendo París. Perfecta y hasta opaca bastante a Lane. Mi drama especial en este episodio son los sentimientos: no se si Rory ama a Logan ni si Logan ama a Rory.
Lorelai Gilmore: impecable. Y Emily, tan Emily. Soy muy fan de Emily y su actuación me pareció simplemente brillante y que el episodio ha rendido sin duda alguna un gran honor a la memoria de Richard.
😭
¡Muchas gracias a ti por leerlo, Pati, y por tu comentario!
EliminarWinter me gustó bastante. Va a los sentimientos y, si añadimos el hype, las lágrimas están aseguradas. Yo soy #TeamLogan y te cito en próximas reviews porque me mojaré mucho más en lo que me parece tanto el comportamiento del personaje como la relación que tiene con Rory y la situación en la que se encuentra esta. Ya he visto el revival entero pero voy poco a poco comentando todo y no quiero adelantarme a nada.
Lorelai es maravillosa y Emily ha estado sublime. Ellas no han cambiado ni un ápice. Y bueno, el homenaje a Richard ha sido muy lacrimógeno pero totalmente comprensible.
¡Un saludo!
¡Hola Irene! Genial review para no variar y con un montón de detalles, poco queda por comentar. Yo me he tomado este revival como un regalo para los fans, así que iba sin expectativas y con muchísimas ganas de volver a Stars Hollow, así que me ha encantado.
ResponderEliminarQuería comentar el momento "tierra trágame" de Lorelai, obviamente no lo hizo a propósito, creo que el cansancio del día, de aguantar a familiares que solo ves en ocasiones contadas y conocidos cuyos nombres ni recuerdas le pasaron factura. Además Emily se sacó el momento de la manga y creo que la presión pudo con Lorelai. Aún así, bien hilado para ir a terapia (luego en Fall se redime con esa preciosa historia).
También quería comentar la evolución (o más bien falta de ella) de Rory. No era mi personaje favorito pero me gustaba, los adolescentes de las series suelen ser un poco petardos pero a ella siempre la he llevado bien excepto en los dos momentos más gordos de estar peleada con su madre (cuando se convirtió en la amante de Dean y cuando dejó Yale). Pero en este revival no sé qué han hecho con su personalidad. Como bien comentabas, era característico de ella sus listas, ¿cómo una persona así de organizada va a sentirse bien dejando cajas con sus cosas por ahí y sin un lugar estable donde vivir? No lo comprendo, al igual que el que esté sin un duro pero tenga un abono de vuelos a Londres xD
Y por último decir que para mi lo mejorcito ha sido Paris, maravillosa con su mala leche, sus comentarios ácidos y esa personalidad tan característica. Y Logan igual de guapo que siempre pero un sin-sangre, no sé como le sigue el rollo a Rory estando prometido :(
Te leo en Spring, ¡un abrazo!
¡Gracias por tu comentario, Bellatrix! Un placer tenerte por aquí :)
EliminarA mí el hype me ha podido pero no niego que la primera vez que vi el revival lo disfruté bastante. Ahora, con este rewatch que estoy haciendo, toca reflexionar sobre lo visto y poner en una balanza lo bueno y lo malo.
Yo creo que ese momento tampoco lo hizo Lorelai a propósito, pero sí es cierto que si estaba cansada, mejor haberse ido a una habitación y dormir allí. Luego lo de la anécdota me pareció un patinazo enorme y Emily fue a matar, como suele hacer siempre.
A mí Rory me caía hasta bien en la serie original (excepto lo de perder la virginidad con Dean y su enfado con Lorelai), a veces la entendía, pero en este revival no hay por dónde cogerla. No hace nada con sentido, hay cosas que no se explican y mira, lo de las cajas por todas partes, hasta en casa de Logan, me parece lo menos normal de todo.
Paris es una de las mejores cosas que tiene esta serie y ha vuelto al 200%. Es un personaje que se echa de menos en la televisión en general. Yo diría que no hay nadie como Paris Geller. Y Logan es mi niño, obvio xD, pero ya me explayaré sobre él en Fall. Quiero dar mi punto de vista de todo cuando llegue al último capítulo y podamos coger perspectiva.
¡Nos leemos! Otro abrazo para ti :)
¡Hola Irene!
ResponderEliminarAixx, las chicas Gilmore volvieron y es que yo las echaba muchísimo de menos.
Tengo que decir que me ha encantado tu post. No dejas nada en el tintero. Yo hace una semana hice un oost, pero cortito, en plan, los cuatro capítulos en líneas generales, en mi blog de iPensamientos de Patri.
Debo decir que sí, Lorelai se pasó tres pueblos en lo del funeral de su padre. ¿De verdad tanto lo odiaba? ¿Cómo no se le ocurre nada que decir? En fin... un desastre. Aunque Emily se pasa otros tres pueblos al decir que era premeditado. Sí, Lorelai es algo egoísta y parece que nunca puede ver nada bueno en sus padres, pero no sé... para mi, las dos son tal para cual.
La relación con Luke sigue igual y es que ella que predica que siempre se debe hablar de todo, es lo que no hace con él. Dime de qué presumes y te diré de lo que careces.
Rory... aixxx esta niña. Me tiene algo decepcionada. No esperaba que fuera una gran periodista, sinceramente, pero no la reconozco. Primero de lo del novio que se olvida de él. Lo hace aposta? Es porque no quiere enfrentarse a romper con él? Porque lo hace fatal. Lo de no tener rumbo fijo la entiendo, en el mundo laboral, hoy día, muchos vamos sin rumbo fijo, pero no hacemos el ganso. Y ahora mi tema favorito: Logan. A veeeeer, este chico le marcó. Le pidió matrimonio, tuvo una relación muy seria con él. Y la verdad, ojalá acabaran juntos. Eso de tener una relación abierta, a él se le ve que no le termina de gustar esta situación y a ella se le ve encantada?? No sé. Algo raro.
Emily, después de lo de Lorelay en el funeral. Está pasando por un momento muy duro. Y debo decir que no sé como reaccionaria si mi marido, mi compañero de vida, durante 50 años se fuera para siempre. El vacío debe ser inmenso.
Yo sí he echado de menos a Sookie. Porque la gran amiga y apoyo de Lorelai siempre ha sido ella, no tenerla en la cocina, me ha faltado.
Saludos y ahora me voy a leer el siguiente capítulo :)
¡Gracias por tu comentario, Mami Reciente!
EliminarYo dejé que vosotros, los lectores y seguidores del blog, votaseis sobre qué preferíais y quisisteis un capítulo por episodio. Yo también lo prefiero porque hay mucho, mucho que contar.
Lorelai tuvo uno de los peores patinazos de su vida y, sinceramente, que no sepa decir nada amable de tu padre me parece too much, sobre todo cuando nosotros los espectadores podríamos decir varias. Y sí, Emily también se pasó bastante. Me parece que aprovecha cada detalle para sacarle a la otra algo en cara y puff, a mí me agota ese tipo de personas. En cuanto a la relación con Luke, me parece muy paradita y sí, siguen mintiéndose o excluyendo ciertos temas, algo que me parece muy de adolescentes. Hay que cambiar la situación.
Rory es bastante decepcionante. Lo de Paul me parece que no tiene gracia en ningún momento. Es más, pienso que está totalmente sacado del personaje de Rory porque ella no es así, no se comporta de esta manera con sus parejas. Por otro lado, entiendo la crisis existencial que le lleva a esa crisis laboral, dando tumbos de un lado a otro, pero tendría que ponerse firme consigo misma y aclarar el asunto. No digo que sea fácil sino que es lo que una persona madura haría. Y bueno, lo de Logan, me encanta él (aunque tenga sus fallos y algunos son indefendibles) pero creo que esta no es el tipo de relación para ellos dos. Más adelante me zambulliré en esta cuestión.
La situación de Emily es muy dura, pero pienso que le da una nueva visión al personaje que puede ser muy interesante.
A mí es que Sookie nunca me ha llamado la atención, por lo que su ausencia tampoco me rechina. Es más, creo que le da espacio a un personaje que lo necesita más: Michel.
¡Otro saludo! :)
Ay dios!! No me ha hecho falta volver a verlo para tenerlo todo fresco!! Pedazo de review Irene! Sensacional como siempre!!
ResponderEliminarVoy paso a paso aunque no me queda mucho por comentar, la verdad jajajaa no has dejado nada en el tintero! ;) Lorelai con el tema de su padre me dejó un poco pasmada. He tenido la sensación de que es un personaje que no ha evolucionado nada. Sigue igual, en su mundo e incapaz de afrontar un gran cambio en su vida: la pérdida de su padre. Tiene tantos sentimientos encontrados que no sabe que hacer con ellos. Eso es algo que le ha pasado siempre, ella parece muy lanzada con la vida, pero no es capaz de afrontar las cosas que le pasan. No se, siempre pienso en el final de la sexta y como reacciona acostándose con Christopher... en sus grandes pérdidas siempre la caga.
En cuanto a Rori, me ha parecido una absoluta locura. Tengo una amiga que está viendo ahora toda la serie y no era capaz de entender cuando Rori deja Yale. Me decía "no pega con ella una rabieta" y tiene razón. Pero según voy analizándolo le pasa lo mismo que a su madre. No sabe reaccionar. Ha sido una niña consentida, perfecta, con las ideas super claras pero en cuanto se encuentra una piedra se desmorona y pierde todo el camino. Es como si estuviera haciendo el papel perfecto e inmaculado pero que se pone a temblar en cuanto encuentra una mancha en su inmaculada ropa. No me gusta esa Rori, tan desorientada, sin casa, sin trabajo, con una pareja de la que no se acuerda (no se como eso es posible en ella)... En cuanto a esto último, quiero pensar que está loca por Logan pero en su tontería y su nueva "madurez" sin ataduras decide ser la amante de un tío comprometido y tener pareja para así ella estar a la misma altura. Ella es la amante de Logan pero Logan lo es también de ella.
En cuanto a lo demás (que no me quiero enrollar): #TeamParis forever!! jajajaja! Que de alegrías y de sonrisas me saca esta mujer. La adoro!! Y bueno, lo de Richard ha sido... bufff menudos lagrimones he soltado.
Voy a leer el siguiente capi!
Un placer leerte!! ;)
Ps, Al ver a Alex Kingston casi me da un parraque. Ains...tengo mono de ver Urgencias again jajajaja!
¡Gracias por tu comentario, MariMar!
EliminarCreo que Lorelai no se enfrenta a sus sentimientos, es una sensación que me da a mí. Por eso los deja un poco de lado y, cuando no puede más, es cuando cortocircuita o algo así. Y cuando ya va a reaccionar, es de la forma inadecuada. No me quiero adelantar a los acontecimientos que ya he comentado en las siguientes reviews, pero Lorelai creo que sí va a evolucionar.
Rory siempre ha tenido rabietas y se ha comportado justo como has dicho, como una niña consentida, perfecta, que no sabe enfrentarse a los baches del camino. Eso con 16 años se le perdona porque está en un periodo complicado, le cuesta asimilar todo y procesarlo, pero con 32 años ya es para hacérselo mirar. Esta Rory no es la que esperaba para el revival, demasiado perdida y demasiado tonta al mismo tiempo. Y, sinceramente, por mucho que me guste Logan, no comprendo la relación que tienen. Es absurda porque no va con ninguno de los personajes.
Paris es un rayo de sol borde pero grandioso, y el homenaje a Richard ha sido precioso.
Un placer verte por aquí :)
PD: Cuando me enteré de que Alex Kingston aparecía en el revival por casi me da un infarto xD