¿Pensábamos que con saber quién era -A se acababa la historia? Por desgracia, no. Pretty Little Liars cerró esa trama de una manera que, a mí particularmente, me encantó, y después se propuso "reinventarse" a sí misma y construir un arco argumental totalmente "nuevo". El primer episodio de la segunda parte de la sexta temporada comenzó con buen pie, es cierto, pero el capítulo final ha cerrado las tramas de manera tan torpe, tan idiota, que parece que los guionistas hayan hecho esta segunda mitad de temporada sin demasiadas ganas. Siento decirlo, de verdad, pero así son las cosas, y así os las he contado.
[¡Spoilers!] El 6x20 "Hush, Hush, Sweet Liars", el episodio final, borra de un plumazo todo lo que los guionistas nos han estado contando esta mitad de temporada. ¿Hacía falta tanto rollo previo para volver a juntar a Aria con Ezra y a Hanna con Caleb al final? ¿Cómo ha sido posible ver a tantos infieles en tan pocos minutos? ¿Qué ha sido ese WTF tan extraño de juntar a Caleb con Spencer... y por qué me ha gustado? ¿Por qué la única pareja que quería que se diera un buen morreo -aka Emily y Alison-, no lo ha hecho? ¿Por qué sus planes siempre son tan idiotas? ¿Por qué nunca avisan a la policía?
Una vez que sabes la verdad sobre esta escena, el gran misterio es cómo narices
logran hacer máscaras TAN buenas
La idea principal de la temporada es que el asesinato de CeCe (o Charlotte, como queráis), obliga a las pequeñas mentirosas a quedarse atascadas en Rosewood. Tanner, que es la policía más inútil de toda Pennsylvania, vuelve a sospechar de ellas. Tras pasar cinco años fuera de ese pueblo, las zagalas habían podido rehacer sus vidas... pero el volver a Rosewood hará renacer viejos fuegos del pasado. OH, ¿DE VERDAD? ¿Nos habéis vuelto a contar LO MISMO de siempre? ¿Para eso le buscasteis nuevos novios buenorros a Aria y Hanna? ¿Cómo es posible que Hanna prefiera a Caleb antes que al MACIZO con acento británico que es Jordan?
¿¿Hanna?? ¿¿Hola?? |
Me olía que el nuevo marido de Alison no iba a ser de fiar desde esa escena en que la tarjeta siniestra para Hanna apareció en las flores de Alison en el hospital (muy fácilmente él mismo podría haberla colocado ahí). Por no hablar de que no era atractivo, tenía cero química con ella y, además, todos sabemos que #Emison será endgame. A la pobre Emily las novias le duran menos que a mí una bolsa de pipas, y estaba claro que es ella la única persona con quien tendría sentido que Alison acabe; porque es la persona que siempre la ha querido, y a quien ella ha comprendido que siempre quiso también. Pero lo que no vi venir es que fuese la madre de Alison quien tuviera esa famosa gemela de la que tanto se ha hablado, y que Charlotte en realidad fuera su hija... o sea, prima de Alison y no hermana... y por eso esté buscando venganza. W-T-F. ¿En serio, guionistas? ¿Otro gemelo que no viene a cuento sacado de la manga en la familia DiLaurentis para salvar el día? Me matáis. Me matáis lenta y dolorosamente.
Ok, esto también me mató </3
Estos capítulos también ha tenido puntazos y buenos momentos, no voy a negarlo, pero todo se ha sentido muy forzado. Más de lo habitual, quiero decir. Que los padres de Aria volvieran a casarse fue como, bueno, ¿vale? Y que Sarah Harvey estuviera todo el tiempo rondando por ahí era absurdo. No sé en qué piensa, cuáles son sus motivaciones, qué hace con su vida, por qué es tan insufrible, por qué se obsesiona tanto con las crías. En general me he divertido (las chiquillas nunca decepcionan con eso), pero siento que han llegado demasiado lejos. La falta del -A auténtico ha sido un gran peso. El #EvilEmoji no ha estado mal, pero se ha sentido como un refrito bananero de -A.
Ya es hora de que termine la aventura. En unos años probablemente se estudie a Pretty Little Liars en las universidades por su asombrosa habilidad para estirar tantísimo tramas que en realidad no son para tanto. Así que emitid ya la séptima temporada y dejadnos ser libres, por favor. Let it go. Que yo os quiero mucho, de verdad que sí, pero esto tiene que acabar. Y A HANNA NI TOCARLE UN PELO, ¿ME OÍS?
PD: ¿Recordáis cuando Caleb dijo que no dejaría que nadie hiciese daño a Spencer? Esa frase tiene mucha gracia ahora mismo, porque resulta que es él mismo quien iba a herirla...
Capullo...
Isidro López (@Drolope)
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