El circo mediático de Sheen continua. Todo comenzó hace un mes, cuando le despidieron de la exitosa comedia Dos hombres y Medio por insultar a los productores de la serie.
Los escándalos se han ido sucediendo uno tras otro, el más reciente, la pugna entre él y su ex mujer Brooke Mueller por la custodia de sus mellizos de dos años de edad. Sheen intentó que sus hijos dejasen de vivir con su madre para ir a vivir con él, ya que acusa a Mueller de ser una drogadicta y de ser un peligro para sus niños. Sheen le impuso a su ex mujer que se sometiera a un examen de drogas, pero Mueller se negó por lo que Sheen interpuso el pasado martes un recurso judicial.
El abogado de Sheen argumentó que Mueller tiene una fuerte adicción a las drogas, y que su cliente está casi recuperado (no nos olvidemos de que Sheen también tiene lo suyo) pero finalmente el recurso lo ganó Mueller, ya que su abogado tenía varios alegatos de supuestas amenazas que Sheen había proferido contra su ex mujer.
Tras esto, Charlie Sheen abandonó el juzgado insatisfecho acompañado por sus DOS novias, a las que él llama sus "dos diosas", dos mujeres con una gran personalidad a las que no les importa ser el segundo plato, para dirigirse a Washington.
Por su parte, Brooke Mueller salió del juzgado muy contenta y abrazó a su abogado. A continuación volvió al centro de rehabilitación en el que lleva ingresada varios días.
En fin, que pena me dan los niños, menos mal que son pequeños y no se dan cuenta del ridículo que están haciendo sus padres.
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